ENERGÍA BRUTAL: SLIPKNOT DESATA EL CAOS Y LA NOSTALGIA EN SU PRESENTACIÓN EN GUADALAJARA.

La noche de viernes en Guadalajara se encendió con un evento que prometía ser inolvidable. Los fanáticos de Slipknot llenaron Calle 2 para presenciar algo histórico: su primer concierto en solitario en la ciudad.

Además, la ocasión tenía un toque especial: se celebraban los 25 años del disco debut que los presentó al mundo como una agrupación única. Slipknot no solo marcó una generación; se estableció como un ícono que rompió moldes en medio del auge del nu-metal, aunque siempre se mantuvieron en su propia liga.

El ambiente festivo ya se respiraba desde antes de entrar al recinto. Por las calles cercanas, se veía a fanáticos de todas las edades luciendo máscaras y los clásicos trajes rojos que definieron la primera etapa de la banda. Desde niños hasta adultos, el público era una muestra de cómo Slipknot ha unido a distintas generaciones bajo un mismo estandarte musical.

Ya pasaban las 9:00 p. m. cuando los primeros sonidos y proyecciones en las pantallas encendieron los ánimos. El público esperaba con ansias, y la ovación no se hizo esperar cuando Corey Taylor apareció en el escenario con su icónica máscara de rastas, rememorando los primeros años de la banda.

La nostalgia estaba en el aire, especialmente al ver los característicos trajes rojos que también evocaban a dos figuras irremplazables en la historia de Slipknot: Paul Gray y Joey Jordison. Su legado estaba más vivo que nunca esa noche.

La apertura con “(Sic)” desató una explosión de energía entre el público, que no tardó en entregarse al headbanging y a los gritos guturales, intentando imitar a Corey. Luego, llegó el turno de “Eyeless”, donde quedó claro por qué Taylor es uno de los vocalistas más versátiles: alternando entre melodías y guturales de una forma que deja a cualquiera boquiabierto. Aunque el sistema de sonido no era perfecto, la banda logró mantener el nivel y encender al público.

Corey, siempre cercano, saludó en español: “¿Están listos? Ahora, canten conmigo”. Esto dio pie a “Wait And Bleed”, una de las favoritas del público, que respondió con una ovación total. Taylor no tardó en expresar su agradecimiento: “Muchas gracias, México, buenas noches”.

El vocalista continuó con un emotivo mensaje: “Hoy celebramos 25 años de nuestro primer disco… Esta noche es especial: solo tocaremos canciones de 1999”. Los gritos y el entusiasmo de los fans no cesaban. Desde “Me Inside” hasta “Purity” y “Liberate”, el setlist era un regalo para los seguidores de la primera hora.

En un momento clave de la noche, Corey se dirigió al público en inglés para agradecer profundamente: “La próxima vez que volvamos a México, prometo hablar mejor español. Somos humildes y agradecidos… Los amamos desde lo más profundo de nuestro corazón”.

El concierto cerró con un trío explosivo: “Spit It Out”, “Scissors” y “Surfacing”. Fueron poco más de 75 minutos de pura adrenalina. Aunque algunos pudieron echar en falta canciones de otros discos, el enfoque en el material del debut fue un homenaje perfecto para los fans más leales.

Slipknot demostró una vez más por qué sigue siendo una banda relevante tras más de dos décadas. Esa mezcla de energía, nostalgia y conexión con su público dejó claro que los maggots de Guadalajara vivieron una noche que quedará para la historia. 🤘