El C3 Rooftop de Guadalajara se convirtió en el lugar perfecto para vivir una noche de buena música y vibes super elevadas con la presentación de Lia Kali, la cantante española y su mezcla de soul y jazz con un toque urbano. Desde el primer momento, la gente estaba lista para disfrutar de algo diferente, algo fresco.

El escenario del C3 se baño en luces magenta y tras una cortina de humo, Lia apareció en el escenario, inundando el lugar con aplausos. Su estilo único y su voz tan poderosa, logró conectar con el público al instante. La noche estuvo llena de emoción, porque Lia no solo cantaba, sino que realmente nos hacía sentir lo que transmiten sus canciones.

La música estuvo cargada de sentimientos con Canciones "Veneno", "Me hace Mal", " que hablan de esos momentos de amor y desamor que todos hemos vivido. Lia nos dio un recorrido por su primer álbum lanzado en el 2023 y una que otra rola que formara parte de su nuevo material discográfico que, esperemos pronto salga a la luz. La noche iba avanzando y los asistentes estábamos enloquecidos con su presentación. Al llegar "Soñar", su último tema, hizo que el lugar vibrará con la misma frecuencia haciéndonos corear con ella esa letra tan llena de sentimiento y motivación, tan así que se podía sentir hasta el ultimo rinconcito de nuestro corazón, como un curita en el alma.

Cada tema era una descarga de emociones, y el público no podía evitar cantar y moverse al ritmo de la música. En cada pausa entre canción y canción, Lia se tomaba un momento para agradecer a Guadalajara, era notorio que estaba contenta, cada palabra era genuina, como si realmente estuviera disfrutando el momento tanto como nosotros.

La vibra del lugar era increíble. La gente cantaba, algunos simplemente se dejaron llevar por la voz de Lia, mientras otros aprovechaban para disfrutar del ambiente único que se sentía en el rooftop. A medida que avanzaba la noche, todo fluía con naturalidad, y la conexión entre Lia y el público era total.

Fue un concierto de esos que se quedan en la memoria. No solo por la música, sino por esa vibra única, tan cercana, tan real. Lia Kali se llevó el corazón de todos los que estuvimos allí esa noche.